Tras el ridículo mundial fuera de los terrenos de juego, como reconoció el propio seleccionador con el anuncio de la lista de convocadas, España intentará evitarlo dentro del campo ante una de las mejores selecciones del mundo y sobre todo tratará de llevarse una alegría que frene el posible pesimismo de cara al futuro por las bajas. Estos dos amistosos ofrecían la oportunidad perfecta para demostrar el verdadero nivel de la Roja ante selecciones candidatas al título, un refuerzo necesario tras el ‘fracaso’ de la Eurocopa del pasado verano, pero ahora la situación es diferente.